viernes, 11 de marzo de 2011

¡Tus manos entre mis manos! Cada persona custodia en su intimidad una puerta del cambio, una puerta que solo puede abrirse desde dentro.



Cambiar es algo asequible a todos.
Lo decisivo es tratarlo con uno mismo. 
El consejo viene de Epícteto: 

"Nadie tiene tanto poder para persuadirte a ti
como el que tienes tú mismo"
                    
 -Alfonso Aguiló-



El blog sin miedos

2 comentarios:

Nortiz dijo...

Me ha encantado ^^
Es que uno mismo es mucho eh, se hace cambiar de opinión rápidamente. Sin embargo, que otra persona te cambie de opinión a veces cuesta más... otras, es muy fácil, la verdad. De todo hay :)
Un saludo

EL BLOG DE MARPIN Y LA RANA dijo...

Uno mismo es todo, querida Natalia.

Un beso