Oráculo de Júpiter
El más antiguo de los oráculos griegos era el de Júpiter, en Dodona. Según se cuenta, se estableció de la siguiente manera: Dos palomas negras emprendieron el vuelo en Tebas, Egipto. Una voló hasta Dodona, en Epiro, se posó en un bosque de robles y proclamó en lenguaje humano, a los habitantes de aquella provincia, que debían establecer allí un oráculo dedicado a Júpiter. La otra paloma voló hasta el templo de Júpiter Amón en el oasis libio y dio allí un mensaje similar. Según otro relato, no fueron palomas sino unas sacerdotisas que los fenicios secuestraron en la ciudad egipcia de Tebas y que establecieron oráculos en el oasis y en Dodona. Para dar las respuestas del oráculo, los sacerdotes interpretaban el sonido de las ramas de los árboles al ser agitadas por el viento.
"...Oh, si pudieras hablar como en Dodona
tus parientes los árboles proféticos,
yo no te preguntaría, curioso, por el futuro,
mejor desconocerlo, sino que quisiera escuchar
de tu boca el menos ambiguo pasado.
-Cowper-
El blog sin miedos
No hay comentarios:
Publicar un comentario