Arte, cultura, corrupción, injusticias y desigualdades, versos de amor y cruda realidad. Cartagena. España. Blog Marpin y la Rana son los progenitores del blog Sin Miedos.
lunes, 20 de mayo de 2013
sábado, 18 de mayo de 2013
Los versos de un poeta muerto.) Amor mío, Esta noche muchas cosas quiero darte. No son ni esmeraldas, ni zafiros, ni rubíes
Sino el reflejo de la luz de la luna sobre las aguas,
Las estrellas del cielo que caen
Como perlas relucientes sobre los verdes prados,
El blando céfiro que sopla entre palmeras.
Quiero darte la serenidad del mar que contemplo,
La paz de mi corazón,
El sosiego del cielo,
La quietud, la armonía, el equilibrio,
La difusa luz que hace dorada la tarde,
Todo mi amor y respeto,
Todos los poros de mi piel.
Te quiero dar las cosas más pequeñas y sencillas.
Pero, sobre todo, toma en silencio,
Amor mío, lo más profundo de mi corazón,
Llévate mi alma que reposa
Entre las flores de mi jardín.
-Antonio J. del Puig-
Marpin y la Rana
Las estrellas del cielo que caen
Como perlas relucientes sobre los verdes prados,
El blando céfiro que sopla entre palmeras.
Quiero darte la serenidad del mar que contemplo,
La paz de mi corazón,
El sosiego del cielo,
La quietud, la armonía, el equilibrio,
La difusa luz que hace dorada la tarde,
Todo mi amor y respeto,
Todos los poros de mi piel.
Te quiero dar las cosas más pequeñas y sencillas.
Pero, sobre todo, toma en silencio,
Amor mío, lo más profundo de mi corazón,
Llévate mi alma que reposa
Entre las flores de mi jardín.
-Antonio J. del Puig-
Marpin y la Rana
martes, 14 de mayo de 2013
EL RITUAL ANTES, DURANTE Y DESPUÉS por Ramón José Gomariz Miralles. Teólogo y terapeuta transpersonal.
Me dispongo a lavar, preparar,
cortar, cocinar...
Respiro, hago consciente mi trabajo
y vivo cada instante presente
explorando la vida
que se me ofrece en cada alimento.
Sin prisas y sin pausa,
vivo estos momentos en un estado
muy próximo a la oración,
en una meditación constante.
"Es posible hacer
lo que no sabemos cómo hacer."
Ablando el vientre,
espero, respiro
y me dejo sorprender
por el tacto, el color
y la textura de esta comida
que se me ofrece como un banquete.
Satisfecho, sereno y reverente
doy gracias a la vida,
respiro esta posibilidad de ser y estar
en el continuo fluir del Amor
que se hace en mí carne y armonía.
domingo, 5 de mayo de 2013
Érase una vez un niño, luego hombre y después anciano. Sin amigos ni familia, analfabeto y toda su vida trabajando en el campo. No tenia nombre ni apellidos. Un día se murió mientras se sentaba en su mecedora, y durante años estuvo balanceándose, ¿cómo y por qué? por la frágil inercia y una constante corriente de aire. Pero antes que los humanos le hallaron las ratas, los gusanos y las cucarachas...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)