CUANDO ME HAN VISTO SOLO Y RECOSTADO,
al borde del camino
UNOS HOMBRES
con trazas de mendigos
QUE CRUZABAN REBELDES Y AFANOSOS
me han dicho:
VEN CON NOSOTROS,
peregrino.
Y otros hombres
CON PORTES DE PATRICIOS
que llevaban en sus galas
INTRANQUILOS,
me han hablado lo mismo;
VEN CON NOSOTROS,
peregrino.
Yo a todos les he visto
perderse allá a lo lejos del camino
y me he quedado solo,
sin despegar los labios,
en mi sitio.
L: León de Felipe "la casa de San Jamás".
GROUCHO MARX
Harta ya de amores absorbentes
me fui a un crucero por Oriente
en compañia de Hércules Poirot
y de un viejo amigo nadador.
Iba en busca del crimen perfecto,
en busca del amor imperfecto,
el hermoso amor con un extraño
el único que no hace daño.
Entonces en el puente le vi,
con sus mostachos; ¡ay de mi!,
dando chinerías a los chinos
a cambio de un camión de langostinos.
Era Grouxo, Groucho Marx,
em más Marx de los hermanos Mars,
campeón de tiro de aspirinas,
licenciado en señoras finas.
Groucho me enseñó su camiseta
nos cantamos viejas operetas
me vendió un casino en Badalona
recitó una oda a la cretona
me besó por un sistema hindú
mató a Hércules Poirot con vudú
destrozó el corazón del nadador
me abandonó en la escala de Cantón.
Desde el puente yo le vi
con sus mostachos, ¡ay de mi!
Cantaba un rock an roll en latín
perseguía submarinos con patín.
Desde entonces errante y triste voy
en compañia de un cow boy
en busca del fondo del mar
como un viejo sentimental.
Vivo del placer de la rutina
remendar sueños con sedalina
mientras huyen las mejores lunas
recuerdo mi única fortuna.
Era Groucho Marx,
el más Marx de los hermanos Marx,
campeón de tiro de aspirinas,
licenciado en señoras finas.
L.: M. Vázquez Moltalbán.
M.: José Aponse "Guillermotta en el país de las Guillerminas".
El blog sin miedos
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