Viñeta del genial Forges (www.forges.com)
-Amén!
-Yeahhhhhhhhhh!
Consciente de que la situación no tiene arreglo, el pesimista busca evadirse de ella, principalmente por tres caminos: El humor, el placer y la estética, sacando cada cual para sí beneficio al máximo.
En algún apartado rincón del universo vertido centelleantemente en innumerables sistemas solares hubo una vez una estrella en la que unos animales inteligentes inventaron el conocimiento. Fue el minuto más arrogante y más falaz de la historia universal; de todos modos sólo fue un minuto. Tras unas pocas aspiraciones de la naturaleza, la estrella se enfrió y los animales inteligentes tuvieron que morir.
Hasta qué punto el intelecto humano constituye en la naturaleza una excepción lamentable, vaga, fugitiva, inútil y arbitraria.
-Nietzsche-
Marpin y la Rana
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