sábado, 1 de enero de 2011

Esopo y su fábula El hombre y la raposa.


Odiaba un hombre a una zorra porque le ocasionaba ciertos daños. Pudo cogerla y, para llevar a cabo una cumplida venganza, atóle a la cola un pedazo de estopa empapada en aceite, prendiéndole fuego. Pero un dios condujo a la raposa a los campos del insensato; era la época de la recolección , y el hombre, siguió a la zorra y contempló, llorando, su cosecha perdida.
Debemos ser indulgentes, mesurados, pues a menudo sucede que la ira causa grandes males a los mismos irascibles.


 El Blog Sin Miedos y el año 2.011

No hay comentarios: